Quaker Qrece ayuda a superar la desnutrición que padecen muchos niños, por lo cual intervino en comunidades priorizadas en el Departamento de Escuintla. Este es el caso de una familia en donde Doña Aura Hernández comenta, que en la Aldea cualquier información llega por medio de un altoparlante, ya que las viviendas están separadas y solo de esa manera se puede compartir la información rápidamente.

Abelino Ixmatul y Alejandra Hernández son los padres de Rosaura de 3 años de edad, viven en la Aldea Guadalupe del municipio de Escuintla. Cada mañana que Rosaura despierta, siempre le espera un delicioso desayuno que su abuela le prepara y aunque sus padres salgan a trabajar desde temprano ella está acostumbrada y a la vez muy feliz de pasar todo el día al lado de su abuela. En la casa tienen corrales con algunos animalitos y lo que a Rosaura le gusta es un conejo que anda suelto por todo el patio a quien corretea y abraza muy feliz.

Doña Aura, abuela de Rosaura comenta, que por medio del altoparlante escuchó la información sobre Quaker Qrece, por lo cual le intereso, ya que ella había notado en su nieta algunos problemas de salud, como la falta de apetito y falta energía que no eran normales para una niña de su edad. Ese día tomó la decisión de acercarse con la facilitadora del proyecto para conocer más información.

A partir de ese momento Rosaura recibió de forma mensual el alimento especializado que ha sido de gran ayuda para mejorar su estado nutricional.

Rosaura participó en el proyecto por un año y ha mostrado los cambios en su salud, creció 10 centímetros de altura y aumentó 8 libras de peso; ahora es una niña muy saludable, activa y alegre, cada día ha disfrutado del alimento que su abuela le proporciona de la manera correcta y como ella dice ”todo lo aprendido lo he puesto en práctica, porque es de mucho valor”