Alianzas para el éxito: sembrando las primeras semillas de cambio
“Aprendí muchas cosas importantes sobre el poder, la autoestima, saber que somos mujeres empoderadas y emprendedoras. Aunque tenemos que asumir muchos retos por ser mujeres, ¡sí podemos! Podemos ser más de lo que ya somos.”
Lidvy Dávila, Comunidad Santa Marta, Batán
Las palabras de Lidvy reflejan el espíritu que está germinando en las comunidades rurales de Costa Rica: la convicción de que cada aprendizaje es una semilla.
Con este espíritu arranca el proceso formativo de Alianzas para el Éxito, una iniciativa que impulsa el liderazgo y la autonomía de mujeres rurales, acompañándolas en el camino hacia mejores oportunidades económicas, mayor seguridad alimentaria y comunidades más resilientes.
Los primeros talleres fueron un espacio de formación, que permitió puertas abiertas para el reconocimiento personal y colectivo; los temas sobre derechos humanos, autoestima, poder y empoderamiento personal, abrieron un espacio seguro para conversar, escucharse, reconocerse. compartir y proyectar su rol como líderesas comunitarias que se inspiran mutuamente.
Gretel, también participante en Santa Marta, lo resume con claridad:
“Este taller me hizo reflexionar sobre la vida que llevamos. Me enseñó que las mujeres no estamos solas, que tenemos personas y empresas que piensan en nuestro futuro. Con su ayuda podemos ser mejores personas y sacar adelante a nuestras familias y comunidades.”
Cada aprendizaje se convierte en motivación para emprender, producir alimentos sanos y fortalecer la economía familiar. Cuando una mujer da un paso adelante, toda su comunidad avanza con ella.
En cada espacio de formación, las participantes refuerzan su autoestima, ejercen su liderazgo y abren camino para que más mujeres se sumen. De este modo, Alianzas para el Éxito está sembrando las primeras semillas de un cambio profundo que empieza a florecer en hogares, comunidades y territorios.